Es ampliamente reconocido el impacto significativo y positivo que las actividades de musicoterapia para personas mayores puede tener en nuestra salud. Por esta razón, la utilización de la música como una forma de terapia está ganando cada vez más importancia.

En esta oportunidad, nos gustaría enfocarnos en describir cuales son los principales beneficios que aporta la musicoterapia para las personas mayores.

¿Qué es la musicoterapia?

La musicoterapia es una práctica terapéutica que utiliza la música para mejorar la salud mental y física de las personas de la tercera edad. Se basa en la idea de que la música puede influir en nuestras emociones, comportamientos y bienestar general. Diversas melodías y ritmos específicos tienen el potencial de aumentar los niveles de serotonina, contribuyendo a lograr una visión más optimista del día o de la situación actual.

Durante una sesión de musicoterapia, un terapeuta calificado utiliza música y elementos musicales, como ritmo, melodía y armonía, para ayudar a los pacientes a alcanzar diversos objetivos terapéuticos.

Estos objetivos pueden variar dependiendo de las necesidades individuales de la persona mayor.

Por ejemplo, la musicoterapia puede ser utilizada para:

  • Mejorar la comunicación y la expresión: Es especialmente útil para personas con dificultades de comunicación, como aquellas con autismo o trastornos del habla.
  • Manejar el estrés y la ansiedad: La música posee un efecto calmante y puede ayudar a las personas a relajarse y manejar mejor sus niveles de estrés.
  • Aliviar el dolor y mejorar la recuperación física: Se ha demostrado que escuchar música reduce la percepción del dolor y puede mejorar la recuperación en pacientes después de cirugías o enfermedades.
  • Estimular la memoria y la cognición: Es útil en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, ayudando a los pacientes a recordar recuerdos y mejorar su funcionamiento cognitivo.
  • Fomentar el bienestar emocional y social: La musicoterapia puede ayudar a las personas a explorar y expresar sus emociones, así como a mejorar sus habilidades sociales.

¿Por qué utilizar la música como terapia?

Porque la música:

  • Es un medio de expresión y comunicación.
  • Produce cambios significativos a nivel fisiológico: presión arterial, respiración, ritmo cardíaco.
  • Favorece las reminiscencias y la memoria.

Estos días, nuestro Musicoterapeuta Iván García Ortega, ofrece a algunos de nuestros residentes un plan de atención basado en las denominadas técnicas terapéuticas creativas, en concreto, la musicoterapia.

Y es que ésta rama terapéutica todavía novedosa tiene múltiples e importantes beneficios para la 3ª edad:

Durante la vejez se intensifica la preocupación por el mundo interno; al mismo tiempo que los objetos del mundo externo, van decreciendo.

Así el anciano se recluye en sus pensamientos, unidireccionalmente hacia su interioridad.

En el envejecimiento se observan tres factores: el psicológico, el biológico y el sociológico.

Factores del abordaje de la musicoterapia para mayores en residencias

Así entonces, es importante pensar en un abordaje musicoterapéutico teniendo en cuenta a todos estos factores como en una totalidad interactuante.

A partir de un trabajo musicoterapéutico, y con una mirada que permite apreciar lo socio-emocional, al mismo tiempo que lo cognitivo-intelectual, y lo sensorio-perceptivo-motriz de cada persona mayor; se habilitarán espacios para que surjan formas de cambiar modos de relación, y así lograr establecer otras, de tipo comunicacional para ir cambiando.

Por ejemplo estados de ánimo no saludables.

Y también para procurar “zonas de encuentro” creando un clima adecuado que posibilite el surgimiento de lo espontáneo, de lo creativo. Crear un clima es crear confianza.

La confianza es usada como elemento indispensable para un nivel de entrega que de lugar a la emergencia de nuevos modos de relación, recreando vínculos.

¿Cuáles son los beneficios de la musicoterapia en personas mayores?

La Musicoterapia  remueve emociones muy profundas que tienen que ver con el interior del sujeto.

De allí el tributo que esta disciplina aporta en el mejoramiento de la calidad de vida de todo ser humano.

Mediante este abordaje, se procurará acompañar al adulto mayor a descubrir una vida más creativa, a cultivar nuevos intereses, a iniciar nuevas actividades, y a restablecer los vínculos sociales necesarios.

Los adultos mayores necesitan que se los ayude a “aprender (en el mejor sentido) a envejecer, en vez de hacerse viejos, simplemente”… aprender a no paralizarse en la vida.

La musicoterapia para adultos en una residencia de mayores tiene muchas ventajas:

  • A nivel cognitivo: favorece la memoria de corto y largo plazo, la atención, orientación a la realidad, evocación de recuerdos del pasado y ayuda a aprender nuevas habilidades.
  • A nivel físico-motriz: el ritmo mejora la coordinación motriz, ayuda al mantenimiento de la motricidad fina y gruesa, la coordinación y favorece la relajación o estimulación a la par que disminuye los estados de angustia y/o ansiedad.
  • A nivel emocional: reduce las alteraciones conductuales, calma la mente, mejora el estado anímico, fortalece la autoestima y autovalía y ofrece espacios de autoreflexión y crecimiento personal.
  • A nivel social: mejora la comunicación y habilidades verbales, incrementa la interacción social, la empatía y reduce las conductas de aislamiento.

Objetivos de las sesiones de musicoterapia en grupo para mayores

Así, el principal objetivo de la musicoterapia para adultos será:

Procurar un mejoramiento de la calidad de vida de las personas adultas mayores, a partir de:

  • La socialización del adulto mayor a través de las relaciones con los otros.

  • La recuperación de la autoestima.

  • Evitar el aislamiento y la inseguridad.

  • El ofrecimiento de un espacio en el que puedan expresarse.

  • La elaboración de las emociones propias de su edad.

La modalidad en que se está impartiendo este trabajo:

  • Dos encuentros semanales de 30-45 minutos de duración, y siempre teniendo en cuenta las necesidades de los usuarios.

  • Los encuentros se desarrollarán en forma individual o grupalmente; en este último caso, con una adecuada atención personalizada a cada uno de los participantes.

  • Sesiones trabajadas a partir de la utilización de material de audio, de la voz, cancioneros y ejecución de instrumentos musicales, entre otras.

 8 Tipos de actividades musicales para adultos

Aunque los ejercicios de musicoterapia para adultos pueden parecer sencillos, bajo la guía de un profesional especializado, estos adquieren un gran valor terapéutico.

Aquí te presentamos 8 ejercicios clave y sus beneficios para la salud mental, física y el desarrollo personal:

  • Escucha: Escuchar canciones seleccionadas para provocar reacciones y analizar emociones y comportamientos relacionados con recuerdos o estímulos.
  • Improvisación: Interpretación espontánea de música, ya sea cantando o tocando un instrumento, para expresar emociones y pensamientos.
  • Composición: Creación de canciones para expresar sentimientos y pensamientos, utilizando palabras o sonidos instrumentales.
  • Recreación de la Canción: Presentación de una canción conocida, cantada o tocada, útil especialmente en la recuperación de daños cerebrales y en el tratamiento de enfermedades como el Alzheimer, la demencia y el Parkinson.
  • Actividades Visuales: Combinación de estímulos visuales y sonoros para reforzar el impacto de la música y facilitar la percepción y reacción del paciente.
  • Uso de Instrumentos de Percusión: Empleo de instrumentos como tambores para expresarse fácilmente, útil en el manejo de ansiedad, agresividad, estrés, traumas e introspección.
  • Música para la Relajación: Uso de música para inducir un estado de calma, aliviar tensiones y promover el bienestar emocional.
  • Juegos Musicales: Actividades grupales como juegos de adivinanzas o identificación de canciones para fomentar la interacción social y reducir la timidez, además de otros beneficios terapéuticos.

Cada uno de estos ejercicios contribuye de manera significativa al bienestar integral de los pacientes en musicoterapia.

¿Cómo mejorar la calidad de vida de las personas mayores con la musicoterapia?

Es habitual que las residencias de ancianos o centros para personas mayores incluyan en sus programas actividades musicales.

Dado que en estas residencias la atención médica es constante y supervisada por expertos, identificamos a aquellos residentes que más se benefician de sesiones musicales específicas.

Dentro de las estrategias para enriquecer la vida de los mayores, se encuentran diversas actividades musicales.

Actividades Musicales para la Expresión Emocional y Estimulación Cognitiva

Tenemos que conocer los gustos y preferencias musicales de los residentes para organizar sesiones efectivas.

Al interactuar con canciones que son parte de su historia, se estimula la memoria y los recuerdos: no solo reviven su pasado, sino que también recuerdan las letras de las canciones.

Escucha Activa e Improvisación en Musicoterapia

La escucha activa en musicoterapia para ancianos mejora la concentración y memoria, además de fomentar la socialización.

El canto y el movimiento improvisado con música pueden ser muy beneficiosos para personas mayores con deterioro cognitivo leve o moderado, ayudando a superar inhibiciones y prejuicios.

Musicoterapia en Terapia Ocupacional y Psicomotricidad

La musicoterapia también se utiliza en actividades de terapia ocupacional y psicomotricidad para personas mayores.

Estas sesiones se centran en el ritmo musical y pueden adaptarse a las capacidades físicas de cada residente, incluyendo actividades como aplaudir, bailar, tocar instrumentos de percusión…

Trabajar con el ritmo es especialmente útil para aquellos con dificultades para caminar o problemas de equilibrio, ya que ayuda a disminuir el riesgo de caídas en personas mayores.

Relajación Mediante la Música

La relajación es clave para gestionar mejor los pensamientos y el desarrollo emocional. La aplicación de la música en técnicas de relajación contribuye a alcanzar un equilibrio mental, físico y emocional más efectivo.

En residencias de mayores, la implementación de la musicoterapia como método de relajación ofrece numerosos beneficios para los residentes:

  • Disminuye el estrés asociado a diversas enfermedades.
  • Salvaguarda al corazón de un desgaste constante y superfluo debido a tensiones continuas.
  • Serena la mente, favoreciendo un pensamiento más claro y eficiente.

Un enfoque común es la meditación visual guiada usando la musicoterapia.

Esta técnica involucra reproducir música suave de fondo mientras el terapeuta conduce al usuario a través de una meditación, describiendo imágenes para inducir un estado de relajación profunda.

Terapia Vibroacústica

La vibroacústica, una rama de la musicoterapia, utiliza la vibración de la música como herramienta terapéutica.

Es una disciplina en desarrollo que explora los efectos de la vibración sonora a nivel psicológico, fisiológico y neurológico.

Generalmente, esta terapia implica proyectar vibraciones sonoras sobre el cuerpo mediante dispositivos vibroacústicos especiales, ofreciendo un masaje profundo mediante ondas sonoras de baja frecuencia para activar o relajar según la señal sonora empleada, buscando siempre promover el bienestar.

Los pacientes utilizan sillas o se acuestan en colchones o camillas de masaje para sentir las vibraciones internas de la música. Se emplean también cuencos y guantes vibroacústicos en algunas intervenciones.

La Música como Estímulo para Otras Actividades

Además, la música se puede usar para crear ambiente y acompañar otras actividades en los centros, como pintura, lectura, costura, juegos, entre otros.

Además, en las residencias de ancianos es aconsejable brindar apoyo psicológico a los usuarios, particularmente en casos donde la música evoca recuerdos o experiencias pasadas.

El uso profesional de la música y sus elementos en contextos terapéuticos con personas mayores abre un abanico de posibilidades y beneficios.

Por ello, la musicoterapia es considerada una técnica valiosa para mejorar la calidad de vida en personas mayores, promoviendo un envejecimiento activo y saludable.