La elección de una residencia de mayores para un familiar es la difícil tarea de la que nadie te enseña; por eso queremos darte unas pautas para que sepas como elegir una residencia de mayores para tu ser querido.

Tienes la tarea de conseguir residencias, centros de día o servicio de ayuda a domicilio o atención domiciliaria, que te proporcionen una atención compasiva y de alto nivel en función del grado de dependencia que tenga tu familiar, para garantizar la salud, la seguridad y el bienestar de tu ser querido.

Veamos pues los principales consejos para buscar una residencia y elegir aquella que deseas para tu familiar. Toda la información necesaria para tomar la mejor decisión.

¿Cómo elegir una residencia de mayores para cuidar a tus seres queridos?

Pedir recomendaciones a amigos y médicos es un buen comienzo a la hora de elegir una residencia para una persona mayor, independientemente de todos los servicios que te puedan ofrecer.

Podrás llegar mucho más lejos con la información de primera mano relativa a:

  • El tipo y la cantidad de personal de atención médica y enfermería que ofrece el hogar.
  • La diligencia del hogar en el cumplimiento de las normas de salud y seguridad, así como las medidas de higiene.
  • El desempeño del hogar en medidas de atención médica y conductuales clave, como el porcentaje de residentes que reciben las vacunas anuales contra la gripe y si los residentes reciben suficiente ayuda con las actividades diarias.

Pero hay que investigar más para encontrar la opción adecuada.

«Siempre animo a las familias a que indaguen más y encuentren información anecdótica e informal», nos dice Lorena, gestora de la residencia para mayores y personas de la tercera edad dependientes de Instituto Geriátrico Valenciano.

La pandemia de coronavirus hace que la inmersión en profundidad sea un reto.

Las visitas en persona a las todas las residencias de mayores están limitadas o simplemente no se permiten, dependiendo de tu comunidad autónoma y de las políticas de la residencia.

Mientras utilizas todos los medios posibles para obtener información, incluso llamar a los servicios sociales para ver si te pueden orientar, estate atento a las siguientes cualidades importantes.

Elegir una residencia de ancianos por la proximidad

Cuanto más cerca esté el centro de tu casa, más posibilidades tendrás de visitarlo o de hablar con el personal.

«No comprometas la proximidad a la familia y los amigos».

Elegir una residencia de mayores de ambiente acogedor

No es aconsejable tomar una decisión para elegir una residencia de mayores basándote en el aspecto del edificio, los patios, los espacios comunes o las unidades de rehabilitación.

«Pide que te muestren todas las unidades. Las habitaciones de subagudos (para estancias de rehabilitación de corta duración) aportan más dinero a la residencia y se renuevan.

Deberías ver las habitaciones destinadas a los cuidados de larga duración, habitaciones en función del nivel de dependencia que tenga el mayor…».

Considera si las habitaciones son acogedoras o si parecen habitaciones de hospital estériles.

La seguridad para elegir la mejor residencia

Es importante que las instalaciones estén bien mantenidas, desde el edificio hasta el mobiliario y los equipos.

Fíjate en los signos de desgaste que puedan suponer un peligro o una incomodidad, como alfombras deshilachadas, ropa de cama desgastada o sillas rotas.

También ofrecen instalaciones con todas las medidas de seguridad: ¿Están a mano los extintores y las puertas de salida?

Pregunta por los planes de evacuación del centro en caso de emergencia.

Elegir residencia de mayores fijándote en el personal

Una dotación de personal suficiente es crucial para la salud de tu ser querido.

Debe haber un equipo profesional permanente en la residencia de mayores, o en su defecto que visiten con frecuencia el recinto.

Médicos, enfermeros titulados, consejeros familiares, auxiliares de geriatría y gerontología, asistentes de enfermería certificados, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, especialistas en el cuidado de heridas, trabajadores sociales o asistente social que te pueda ayudar a gestionar las ayudas a la ley de dependencia….

La compasión a la hora de elegir la mejor residencia

Para elegir la residencia además de realizar una visita virtual y mantener conversaciones con los responsables administrativos de un centro, nuestra prioridad debe ser hablar con los responsables de enfermería o de las actividades, para hacerse una idea de sus habilidades de comunicación y cuidado.

Me interesan los signos y señales de empatía y compasión.

Pregunte si están dispuestos a compartir si tienen familiares en centros de enfermería y cómo tomaron sus decisiones de colocación.

«Pregúntales qué es lo que más les gusta del cuidado de sus residentes»

Retención del personal en las residencias para personas mayores

La fuerte rotación de personal es un indicio evidente de que los trabajadores están descontentos, y su insatisfacción puede significar una peor atención personal al residente.

Las mejores residencias de ancianos con las que he trabajado tienen una alta retención de personal, y a veces incluso se ven generaciones de familiares que han trabajado allí.

Quieres que el personal sienta que está haciendo algo significativo.

También te interesa conocer antes de elegir la residencia la longevidad de los equipos directivos y administrativos. Más continuidad en sus puestos muestra una infraestructura más estable.

Asignación coherente

A la hora de elegir la mejor residencia para tu familiar, pregunta a los administradores y al resto del personal si los cuidadores trabajan con los mismos residentes cada vez que están de servicio.

Esto se llama asignación consistente. Ayuda a los cuidadores a la hora de tomar en cuenta las necesidades básicas personales en el día a día de los residentes, para poder ofrecerles una mejor atención.

También ayuda a los residentes a sentirse más seguros y cómodos.

Buena interacción con los residentes

En las pequeñas interacciones entre los miembros del personal se pueden detectar señales de que los residentes son respetados y se preocupan por ellos.

Por ejemplo,

¿las enfermeras llaman a la puerta antes de entrar en todas las habitaciones?

¿El personal se dirige a los residentes de forma casual e impersonal o de forma educada y por su nombre?

Flexibilidad en las visitas

Antes de la pandemia, las mejores residencias para personas mayores y ancianos ofrecían un horario de visitas abierto.

Desde entonces, la mayoría de las residencias de ancianos han restringido las visitas debido a los riesgos del COVID-19.

Pero hay otras formas de ver o comunicarse con su ser querido, y eso es extremadamente importante, ya que el aislamiento es un grave peligro para la salud.

Busca una residencia de ancianos que se esfuerce por permitir que los residentes vean a sus seres queridos.

Averigua si puedes programar visitas en persona, con qué frecuencia y en qué circunstancias.

Actividades interesantes para los residentes

Los juegos sin sentido no deberían dominar el horario.

Busca una residencia que ofrezca muchos tipos de actividades sociales, físicas, interactivas y educativas.

También: ¿Hay una zona al aire libre para pasear, comer o visitar a la familia o los amigos?

¿Se ofrecen actividades para personas con discapacidad? A

lgunas residencias ofrecen clases de yoga para personas en silla de ruedas, por ejemplo.

¿Puede un miembro del personal llevar a alguien en silla de ruedas al exterior?

Pregunta cómo el director de actividades hará participar a tu familiar.

Tareas significativas

Algunas residencias de ancianos dan a los residentes capaces la oportunidad de realizar las tareas significativas que antes hacían en casa.

Por ejemplo, pueden incluir la entrega del correo, llevar jarras de agua a los residentes o leer a los demás.

Oportunidades de tomar decisiones

Tu ser querido debería poder opinar sobre sus cuidados, como las horas de sueño y de vigilia, las actividades en las que participa, la ropa que lleva y lo que come teniendo en cuenta sus necesidades nutricionales.

Pregunta si durante la pandemia se permite a los residentes socializar y comer juntos durante las comidas, y si se les permite comer en su habitación si prefieren comer solos.

Encontrar una residencia de ancianos con todas estas cualidades puede ser un reto, pero es posible.

Una vez que hayas seleccionado una residencia para mayores o personas de la tercera edad, debes seguir haciendo preguntas y mantenerse involucrado en el cuidado de tu familiar, especialmente si notas alguna señal de alarma, como un cambio repentino en las políticas, un cambio notable en la cognición de su ser querido o administradores que nunca parecen estar cerca.

El consejo más importante es que, independientemente del lugar que elijas, te mantengas en contacto con el centro.

Aunque las conexiones con el personal y los administradores no sean en persona, sus demostraciones de cuidado y preocupación por tu ser querido sólo ayudarán a reforzar y mejorar la atención que se le presta.